El coportavoz de Compromís a las comarcas de Castelló, Carles Mulet, ha afirmado hoy que el segundo incendio consecutivo en la planta de Reciplasa en 11 días, justamente en la zona donde se amontona los residuos que no se pueden reciclar, afectando, en las dos ocasiones, según las informaciones publicadas, a unos 5.000 metros cúbicos de residuos, pero sin dañar las infraestructuras, son de esas coincidencias sorprendentes que hay que investigar a fondo “ por casualidad o causas fortuitas Reciplasa se ha convertido en una rústica e improvisada incineradora de unos residuos justamente cuando no sabe qué hacer en ellos, o la divina providencia tiene planes para reducir unos residuos que no se sabe qué hacer en ellos”
Mulet ha recordado que ya se advirtió de la falta de justificación de la viabilidad de las nuevas instalaciones proyectadas en la planta, cuando en septiembre de 2012, Alberto Fabra colocaba la primera piedra de la futura planta de transformación en combustible derivado de residuos. CDR los residuos no reciclables; nadie iba a pedir ni consumir ese CDR; ahora, el tiempo ha dado la razón, y la planta valorada en 9 millones de euros, no ha empezado a construirse, los residuos de la planta actual de Onda están amontonándose, y no se sabe qué hacer con ellos, y de repente, la suerte hace que se incendie parte de los residuos que esperan la nueva planta.
La excusa de un supuesto acuerdo entre Reciplasa y la cementera CEMEX era desmontada por la propia Consellera de Infraestructuras, Territorio y Medio ambiente a preguntas parlamentarias de Compromís; nadie demandaba este CDR, entonces, ¿por qué se enfrascaba esta empresa participada por los principales ayuntamientos de la Plana en un proyecto como esta, sin analizar la viabilidad?, ¿por qué no se apostaba por otros sistemas de gestión de los no-reciclables?. ¿Por qué salían unas cifras tan escandalosamente altas?

Estas instalaciones, presupuestadas en 9 millones de euros ( a pagar en gran medida por los municipios afectados, es decir, por los contribuyentes), iba a generar según los primeros anuncios 75.000 toneladas de CDR, en época de boom urbanístico, por ejemplo, la cementera de Buñol tenía una demanda de 150.000 toneladas al año de CDR , mientras que ahora, como mucho, 50.000 toneladas

Desde Compromís ya se advirtió que cuando supuestamente se pusieran a producir CDR para las cementeres, no habría ninguna garantía de que este CDR vaya a ser adquirido y consumido . ¿Qué pasaría si hacemos CDR y después nadie lo compra?, ¿e habrá encarecido el proceso de tratamiento del residuo-rechazo, y a cambio no habrá quién lo compre. Tocará enterrarlas también en un vertedero?

Para Compromís, no se han explicado qué parte del coste que ocasiona hacer el CDR se podrá recuperar con la supuesta venta a las cementeras, y cómo piensa la empresa concesionaria de Reciplasa recuperar la inversión de más de 9 millones de euros “resulta como mínimo curioso que se le conceda directamente a la misma UTE, sin experiencia en el sector del CRD, explotar una nueva planta. No ha habido concurso público mientras actualmente hay 8 empresas privadas que se dedican a hacer ese producto. ¿Hubiera salido más barato llevar los residuos a esas empresas antes de comprar toda la maquinaría y hacer una fuerte inversión pública?, ¿se han hecho números?, ¿se ha dejado a alguna otra UTE entrar en el nuevo negocio?, respuestas     que el Consell no explica. 9 millones de euros de dinero público en la nueva nave y la compra de maquinaria, los precios, según gente del sector, es como mínimo cuestionable, puesto que parece que se podría conseguir todo por precios más bajos.

Ahora, entre la primera piedra de las nuevas instalaciones, y la segunda, han pasado más de año y medio, y en Onda ya no se sabe qué hacer con los residuos, mientras, misteriosamente, cada 11 días se queman sin explicar el origen de este incendio selectivo, ¿el próximo incendio en semana santa?